Formación de Seguridad Laboral 168

FORMACION EN PRL 59 Noviembre-Diciembre 2019 Más información: [email protected] visión integral de la seguridad e incorporar la seguridad como una estrategia compe- titiva para su empresa, porque no se debe obviar que el trabajador es el principal ac- tivo de una organización. Además, apostar por el grado como título habilitante para técnico superior facilita la promoción de los técnicos intermedios. El trabajo emprendedor de esos técnicos, comprometidos con sus valores prevencio- nistas y su visión de la seguridad como mo- tor empresarial, ha conllevado que se esté superando el concepto de empresa com- prometida con la prevención de riesgos la- borales para hablar de empresas saluda- bles , entendidas como aquellas en las que el trabajador no sólo no debe sufrir acci- dentes laborales, sino contar con el espacio laboral necesario para poder desarrollarse como profesional y como persona. Nuevos retos de la transformación sociolaboral Una vez conquistado este cambio de mentalidad, como univer- sidad nos enfrentamos en la actualidad a los nuevos retos que nos impone la realidad: industria 4.0, digitalización del trabajo, conexión laboral 24 horas, etc. Esta transformación sociolabo- ral ha creado nuevas necesidades y oportunidades que obligan a replantearse la formación en el ámbito de la prevención de riesgos laborales. Los técnicos superiores han de ser capaces de utilizar en su favor las bondades de la tecnología : la robótica colabora- tiva, la optimización de los tiempos de trabajo, la evitación de la exposición repetitiva del trabajador a un puesto de traba- jo mecánico, el acceso y análisis de la información y la mejo- ra en la toma de decisiones. Ello permitirá prevenir la dilación de las jornadas laborales y la falta de desconexión entre jor- nada laboral y vida social, así como disponer de una respues- ta eficiente a todos los nuevos y emergentes riesgos labora- les. Todo ello con la idea de poder hacer valer evaluaciones de riesgos a tiempo real, de manera continuada y personalizada, atendiendo a las peculiaridades no sólo del puesto de traba- jo sino de las características de la persona. Así, los trabajado- res tendrán la oportunidad de desarrollarse plenamente como profesionales, impulsando sinergias positivas en las organiza- ciones que generarán competitividad, productividad y atrac- ción para el nuevo talento , dado que la calidad del trabajo y del ambiente laboral es y será un elemento a valorar a la hora de escoger una organización. En conclusión, la formación que reciba el técnico superior de prevención de riesgos debe dar respuesta a la necesidades ac- tuales y futuras para convertirse en una pieza clave en la ges- tión empresarial y en el marco estratégico de la organización. Lógicamente, hay que cumplir con el mandato curricular del anexo VI del Real Decreto 39/1997, de 17 de enero, pero como bien indica el propio reglamento, ese programa forma- tivo conlleva el “contenido mínimo” para desempeñar las fun- ciones de nivel superior. Por eso, independientemente de la necesidad de revisar y actualizar la normativa en este ámbi- to, no hay excusas para no formar a los técnicos en los nuevos riesgos sociolaborales tecnológicos. En la Escuela de Prevención y Seguridad Integral de la Uni- versidad Autónoma de Barcelona apostamos por hacer fren- te a estos nuevos retos desde la formación y capacitación del técnico superior de prevención de riesgos laborales como ta- lento y agente estratégico de la seguridad de su organización en esta nueva sociedad tecnológica. La formación que reciba el técnico superior de prevención de riesgos debe dar respuesta a la necesidades actuales y futuras La formación tiene un papel protagonista para capacitar a profesionales competentes en este nuevo contexto sociolabo- ral tecnológico, porque los cambios en el sistema de producción derivados de la llamada “revolución 4.0” exponen a los traba- jadores a nuevas condiciones laborales y nuevos riesgos tec- nológicos que el técnico superior de prevención de riesgos la- borales debe conocer, minimizar y prevenir. Debe dotárseles de las competencias y herramientas necesarias para que pue- dan aprovecharse de las oportunidades que ofrece la tecnolo- gía y desarrollarse en entornos complejos. Algunos ejemplos: el uso de drones, que nos facilita información en lugares de difí- cil o peligroso acceso; la robótica colaborativa, que evita la ex- posición del trabajador a riesgos repetitivos; o el nuevo mode- lo de gestión basado en la utilización de datos, que optimiza la toma de decisiones.