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Patrocinador: Entidades colaboradoras: ENCUENTROS CON 12 Octubre 2016 una prevención de riesgos laborales en papel a una “PRL efecti- va, real, con cursos y reciclaje”, con un personal formado en mé- todos de trabajo que enseñen a otros, concluyendo que “con el ébola aprendimos que hay que unificar, en las pandemias hay que disponer de grupos formados específicos”. María Ángeles Sánchez Uriz , del Hospital Universitario In- fanta Leonor, coincidió en que “los servicios de prevención su- frimos mucho en la época del ébola, la presión mediática fue salvaje y demoledora”, pero también “aprendimos mucho y se hizo un esfuerzo de formación espectacular, pero si no se prác- tica volvemos a tener un problema muy serio, siendo el entre- namiento continuo necesario”. Unidades de aislamiento de alto nivel En el caso del ébola, y de la recientemente mediática fiebre he- morrágica de Crimea-Congo, las unidades de aislamiento de alto nivel (UAAN) juegan un papel determinante en las que deben primar la seguridad y la salud de los trabajadores que desempe- ban a esa tarea que era la que generaba el riesgo”, añadió María Ángeles Sánchez Uriz , jefe del Servicio de Prevención Manco- munado de Grupo Hospital Universitario Infanta Leonor, vien- do que el porcentaje real del tiempo que hacían dicha actividad era mínimo, “lo que nos daba unos argumentos muy sólidos a la hora de decir que, aunque el trabajador tenga esta patología, puede seguir trabajando en este puesto, con otras tareas por medio y, además, puede hacerlo con medidas organizativas, con equipos como grúas o entre muchos trabajadores”. Para Inmaculada Pérez , técnico superior de prevención del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Hospital Uni- versitario 12 de Octubre, es imprescindible reflejar en la histo- ria clínica “si el paciente colabora o no”, contemplando también si hay que utilizar grúa, si la habitación es pequeña, “si no hay el suficiente número de arneses”, siendo necesario implicar a la di- rección y realizar un gasto para disponer de los medios necesa- rios para movilizar pacientes. Ébola La crisis del ébola, desatada en el verano de 2014, suscitó un interesante debate desde el punto de vista preventivo y de la seguridad en el trabajo. Para Javier Negredo , jefe de Sección de Seguridad del Hospital Universitario La Paz, el tema del virus “lle- gó de sopetón, el contagio no se sabía hasta días después”, con los peligros de transmisión externa que conllevaba, siendo la situación de estrés y an- siedad entre los trabajadores del ámbito sanitario “muy importante”. Para Luis Mazón , del Hospital Universitario de Fuenlabrada, “el ébola supuso poner encima de la mesa la labor que estaban haciendo los servicios de prevención. Se nos denostó cuando hacemos un trabajo sordo y efectivo”. Para lograr el éxito ante estos retos y otros similares, es preciso pasar de Inmaculada Pérez T écnico superior en PRL del S ervicio de PRL del H ospital U niversitario 12 de O ctubre Luis Mazón C oordinador del S ervicio de PRL del H ospital U niversitario de F uenlabrada “En la historia clínica debe figurar si el paciente colabora o no en su movilización” “Decidimos modificar el análisis clásico de los trastornos musculares elaborando perfiles específicos”