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“Aquel que prevé, es dueño de sus actos”. Johann Wolfgang Goethe OPINIoN 5 Octubre 2017 Los trabajadores jóvenes: el futuro de la seguridad laboral L os pasados días 3, 4, 5 y 6 de septiembre Singapur acogió el XXI Congreso Mundial sobre Seguridad y Salud en el Trabajo, el cual se celebra cada tres años organizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Asociación Internacional de Seguridad Social (AISS). En esta edición contó con el patrocinio del Ministerio de Trabajo de Singapur. En la inauguración de este evento, el director general de la OIT, Guy Ryder declaró que “la falta de inversiones suficientes en la seguridad y la salud en el trabajo tiene un impacto económico global que equivale aproxima- damente al PIB de los 130 países más pobres del mundo”. Además, tal y como recoge la OIT en su página web, “las nuevas estimaciones mundiales indican que las enfermedades y los accidentes relacionados con el trabajo representan 3,94% del PIB global anual, 2,99 billones (millones de millones) de dólares. Esto significa que cada año 2,78 millones de trabajadores mueren a causa de enfermedades o accidentes relacionados con el trabajo; 2,4 millones de estas muertes pueden ser atribuidas única- mente a las enfermedades profesionales”. Estos inquietantes datos ponen de manifiesto nuevamente el drama hu- mano y las negativas consecuencias económicas que supone no articular las medidas necesarias y eficaces para responder a los problemas vinculados a la seguridad y salud laboral. En este contexto, y de cara al largo plazo, la actitud proactiva de los jóvenes juega un papel fundamental a la hora de enfrentarse a los retos en materia de prevención de riesgos laborales. “La manera cómo se configurará el futuro del trabajo tendrá, sin duda, un mayor impacto so- bre esta generación y la próxima, y ellos deben participar en este proceso, incluso en lo que se refiere a la SST”, alertó Guy Ryder quien añadió que “cuarenta millones de jóvenes se incorporarán al mercado laboral este año y ellos son la generación mejor educada que el mundo haya conocido jamás. Tenemos que aprovechar este dividendo demográfico y liberar el potencial y la creatividad de estos jóvenes”. Para fomentar esta filosofía, “en el marco del proyecto de la OIT Safe- Youth@Work , unos 125 promotores jóvenes provenientes de más de 29 países participaron en un congreso de jóvenes paralelo al congreso mundial. El Congreso SafeYouth@Work aspira a crear una red de jóvenes pro- motores en el ámbito de la SST a fin de abordar los importantes desafíos en materia de seguridad y salud en el trabajo que enfrentan los trabajadores jóvenes”, tal y como explica la OIT. Distintos datos proporcionados a lo largo de los últimos años por fuentes de reconocida solvencia reflejan los preocupantes altos índices de incidencia que afectan a los jóvenes en cuanto a accidentabilidad. Las causas apuntadas son múltiples. Una de las principales tiene que ver con la formación en PRL, siendo ésta en ocasio- nes nula o deficitaria. En plena era de las innovaciones tecnológicas y de unos planes educativos en constante proceso de incorporación de materias y conocimientos vanguardistas se echa en falta que, desde el colegio, se imparta una asignatura o formación específica en seguridad y salud laboral. La precariedad laboral es otro factor que incide directamente en la seguridad de los trabajadores jóvenes, lo que les convierte en un grupo especialmente vulnerable y sensible a los accidentes de trabajo. Resulta del todo imprescindible que conozcan sus derechos y el Gobierno debe velar para que los empresarios cumplan con las responsabilidades marcadas por la ley en materia de seguridad y salud laboral. Garantizar a los jóvenes un trabajo digno, de calidad, enmarcado en los objetivos establecidos en la denominada “cultura de la prevención”, resulta ética y legislativamente exigible y redunda en la competitividad y productividad de las empresas. De este modo, al final todos ganamos. La formación en PRL nula o deficitaria y la precariedad son factores que inciden negativamente en los índices de incidencia