seguridad laboral 158

91 Abril 2018 Más información: [email protected] proteccion cabeza ocular auditiva y respiratoria datos obtenidos en los ensayos a los que se someten los EPR en el laboratorio. Sin embargo, el FPN es un valor que se obtiene en “condiciones ideales”, por lo que habitualmente este factor no se corresponde con la protección ofrecida en condiciones de uso reales, donde la protección que ofrece el EPR puede verse mermada debido a fac- tores como la selección de tallas inadecuadas, presencia de vello fa- cial, falta de entrenamiento en la colocación y ajuste del EPR, entre otros. Por ello, es altamente recomendable que durante la selec- ción y uso de los EPR los usuarios reciban entrenamiento acerca de la importancia de mantener un buen ajuste facial en todo momen- to, así como en la realización periódica de pruebas de ajuste en las condiciones habituales de uso de los equipos. Adaptación del EPI Los EPR, como todos los EPI, deberán adaptarse a las condicio- nes físicas del usuario y a las particularidades de la tarea. Así, du- rante el proceso de selección debería tenerse en cuenta facto- res como: estado físico del usuario y otras condiciones propias del usuario, tiempo de uso, necesidades de visibilidad, movilidad y comunicación, estrés térmico y uso de otros EPI. Adicional- mente, consideraremos el ritmo de trabajo asociado a la tarea ya que en ritmos de trabajo elevados pueden producirse fugas de aire exterior hacia el interior del adaptador facial, por lo que deberían considerarse equipos de presión positiva. Por último, y a modo de conclusión, debemos hacer hincapié en la absoluta necesidad de seguir las indicaciones del EPR a la hora de utilizar los equipos, ya que el fabricante es quien po- see el conocimiento más fiable acerca de las particularidades del EPI, por lo que es quien mejor puede establecer las condi- ciones en las que el funcionamiento y prestaciones del EPI se- rán óptimas. 2. No Herméticos . Se trata de cascos, capuchas o incluso tra- jes de protección, luego tienen un ajuste más holgado al ros- tro del usuario. La protección se basa en suministrar un cau- dal de aire suficiente que impida la entrada de contaminan- tes en la pieza facial 3. Boquillas : sólo para ciertos equipos, como los de evacuación. Se usan con un clip nasal. Otro de los componentes básicos de muchos EPR es el fil- tro, el cual permite atrapar los contaminantes presentes en el aire. Dependiendo del estado del contaminante, tendremos distintos tipos de filtros: 1. Filtros de partículas (EN 143) que retiran contaminantes en forma de polvos, fibras, humos, microorganismos que se transportan en gotitas, etc. Se marcan con la letra código P y se clasifican en tres clases según su eficacia: Clase 1. Filtros de baja eficacia . Se designan como P1. Clase 2. Filtros de eficacia media . Se designan como P2. Clase 3. Filtros de alta eficacia . Se designan como P3. 2. Filtros para gases y filtros combinados (EN 14387) . Elimi- nan del aire gases, pudiéndose combinar con filtros de partí- culas. De forma análoga a los filtros de partículas, tienen tres clases atendiendo a su capacidad. También hay una clasifica- ción (que se distingue visualmente mediante un código de colores) dependiendo del tipo de gas que eliminen. Fundamentos en la selección de un EPR El RD 773/1997 establece la forma en que deben usarse los EPI, una vez se ha tomado la determinación de hacer uso de los mis- mos. En este sentido, hay que señalar que la efectividad del EPI dependerá enormemente del proceso de selección que se lle- ve a cabo. En el caso de los EPR, además de seguir lo indicado en el RD 773/1997 es altamente recomendable realizar la selección en el marco de un programa de protección respiratoria. El programa de protección respiratoria implica una serie de requisitos, entre los cuales destacaremos: Establecimiento de un único responsable de la coordinación y dirección del programa. Evaluación y control del riesgo . Deben considerarse otras medidas antes del uso de EPR. Además, deben conocerse a fondo todos los pormenores de los procesos y equipos en los que se utilizarán los EPR. Adecuación del EPI Además, el EPR seleccionado deberá ser adecuado para el tipo y nivel de riesgo evaluado. Un EPR se considera adecua- do si es capaz de reducir la exposición del usuario al riesgo a un nivel aceptable (por ejemplo, para cumplir con los valo- res límite de exposición ocupacional). Deberemos considerar aquí un parámetro específico del ámbito de la protección res- piratoria: el factor de protección nominal (FPN), el cual se en- cuentra registrado en tablas y que se obtiene a partir de los

RkJQdWJsaXNoZXIy MzA3NDY=