Fsl-LATAM 005

10 Primer semestre 2018 Frecuentemente escuchamos que para poder aspirar a una vida adulta saludable debemos cuidarnos desde jóvenes, es decir, ali- mentarnos sanamente, realizar alguna actividad deportiva, des- cansar adecuadamente, procurar un ambiente laboral sano, una vida social libre de drogas y/o alcohol, alejarnos de malas amista- des, etc. Sin embargo, aun siguiendo todos estos consejos al pie de la letra, nuestra salud adulta podría verse seriamente com- prometida por situaciones ajenas a nosotros, situaciones de ca- rácter laboral, las cuales probablemente generarían enfermeda- des ocupacionales graves. Enfermedades que no se manifiestan sino hasta después de 5, 10, 15 ó 20 años de exposición conti- nua a ciertos agentes contaminantes como, por ejemplo la pér- dida auditiva inducida por ruido, el síndrome de Raynaud, los trastornos oculares o el cáncer en vías respiratorias. Es decir, no basta con tener un ambiente laboral sano (mentalmente ha- blando), sino que también debe ser higiénico para evitar que nuestra salud vaya mermando con el paso de los años sin per- catarnos de ello. Ambiente laboral higiénico Un ambiente laboral higiénico significa que los agentes conta- minantes a los que pueda llegar a estar expuesto un trabaja- dor deben estar controlados, de tal manera que esta exposi- ción no exceda los valores límites permisibles establecidos en las leyes y/o reglamentos. Algunos de los principales agentes contaminantes a los cuales nos exponemos diariamente en el trabajo (y que desencadenan enfermedades ocupacionales gra- ves) pueden ser los siguientes: ruido, vibraciones, temperatu- ras extremas, radiaciones, iluminación, sustancias químicas pe- ligrosas, etc. El control de la exposición a estos contaminantes sigue la tra- dicional pirámide de jerarquía de control de riesgos: elimina- ción, sustitución, ingeniería, administración y equipo de protec- ción personal. Debido a que no siempre es sencillo controlar la exposición a estos agentes, se recurre al control administrativo y/o al control con equipo de protección personal. Es aquí don- de hago énfasis en las situaciones de carácter laboral, las malas decisiones tomadas en el trabajo, ya que en muchas ocasiones se considera como la principal medida de control del riesgo el uso de equipo de protección personal (siendo que es la última opción en la pirámide de la jerarquía de control de riesgos), te- niendo la vaga idea de que el problema está resuelto (además de que es la más económica). Finalmente, se deja la responsa- bilidad total del control del riesgo al propio trabajador sin pro- porcionarle la principal herramienta para este tipo de control de riesgos, la capacitación para el uso y mantenimiento del equi- po de protección. En la industria de la construcción es muy frecuente encontrar trabajadores usando EPP de forma errónea (cascos colocados al revés o sin ellos, conchas auditivas sobre el casco en ambientes ruidosos, respiradores para compuestos orgánicos volátiles en actividades de soldadura, sin guantes apropiados o guantes con los extremos rotos exponiendo los dedos, zapato tenis, etc.) o EPP que no cumple con las especificaciones técnicas requeridas y/o certificaciones de cumplimiento obligatorio. El mal uso del EPP se debe principalmente a que no se les informó de forma clara y precisa su alcance y limitaciones, por falta de interés del mismo trabajador o por la falta de conocimiento del encargado de la seguridad industrial. La importancia de la protección respiratoria Miguel Ángel Crisóstomo Raya Supervisor de Seguridad e Higiene Industrial en Mejoramiento de Suelos Menard México Es necesario implementar un programa de protección respiratoria en el cual se retroalimente o enseñe al trabajador MEXICO

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