Seguridad Laboral Latam 009

26 Primer semestre 2020 Vivimos cambios acelerados marcados por un conjunto de transformaciones en marcha y otras prontas a ocurrir por cam- bios en la economía global, con impacto en la sociedad y en una “forma de vivir", tendencia de este siglo XXI marcada por la automatización y el intercambio de datos, incluyendo los siste- mas cibernéticos, el internet de las cosas y la computación en la nube, conocida como “cuarta revolución industria”. El impacto en la economía y en la sociedad de las tecnologías de la información y las comunicaciones-TIC, la innovación tec- nológica y el paso a la economía digital ha generado cambios en los paradigmas acerca de qué hacer y cómo utilizar la informa- ción, pero las cifras reportan que las mujeres están subrepre- sentadas en la industria de la tecnología, y por tanto, la automa- tización hará que en particular se vean mayormente perjudica- das al perder empleos a una velocidad mayor a la de los hom- bres. A pesar del abrumador dominio masculino en el sector de la tecnología, cada vez son más las mujeres que ocupan puestos clave de dirección y estrategia en empresas del ámbito tecnoló- gico y que han conseguido grandes avances para las compañías en las que trabajan. Persiste una significativa diferencia en la matriculación en las carreras de ingeniería, física y matemáticas-STEIM (ciencia, tec- nología, ingeniería y matemática), como parte de la herencia de la construcción sociocultural que afianza la división sexual del trabajo y, por lo tanto, las mujeres asumen carreras relaciona- das con su rol tradicional. Se han identificado cuatro causas que influyen en el hecho de que muchas niñas se alejen de las distintas ramas de la tecnolo- gía y la ciencia, del desinterés de las niñas por las STEM. - El desconocimiento de la aplicación real. - La falta de modelos de mujeres profesionales. - Los estereotipos. - La autopercepción de las propias niñas de que no son bue- nas en estas materias. Los estereotipos se basan en subjetividades o creencias y son inherentes a una sociedad, a unas costumbres y a un momen- to. Asignan roles de grupos a individuos, obviando particulari- dades y excepciones. El Informe de ONU ‘Mujeres y las desigualdades en el sec- tor TIC’ evidencia los obstáculos a los que se enfrentan las mu- jeres y las niñas a nivel mundial que les impide acceder a carre- ras en el sector TIC: claramente las dificultades comienzan con el acceso a una educación digna y libre de estereotipos anticua- dos o la permanencia de las mujeres en carreras tecnológicas y científicas. Desde un enfoque de género, la investigación, la innovación, la tecnología y la educación son fundamentales para impulsar a la mujer en esta cuarta revolución industrial. Nuestra capacidad para asumir los cambios acelerados a los que nos enfrentamos cada día depende, en gran medida, del conocimiento que ten- gamos de nosotros mismos y de nuestro entorno. La respuesta de los Estados para cerrar la brecha digital de género mediante políticas públicas con perspectiva de género contribuye a potenciar los impactos positivos de las TIC en la reducción de las brechas sociales de género existentes. No hay discusión: el futuro es tecnológico y cada vez estamos más rodeados de tecnología. Si las mujeres no acceden a estos puestos, que previsiblemente van a estar bien valorados y re- munerados, no solo habrá una brecha de género, sino que tam- bién aumentará la brecha salarial. Se puede definir la cultura como conjunto de relaciones hu- manas que han trascendido en el tiempo y que le permite al hombre conservar, reproducir, crear nuevos conocimientos y valores para la transformación de su medio social y cultural. Se considera un factor fundamental de la calidad de vida, una di- mensión esencial no sólo para la preservación de la identidad, Brechas de género y TIC: primero una transformación cultural Gloria María Morgan Torres Consultora internacional y docente de cátedra colombia

RkJQdWJsaXNoZXIy ODM4MTc1