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82 Primer semestre 2018 seguridad laboral en el sector transporte gionelosis y tosferina) o enfermedades víricas (varicela, rubéola, sarampión, gripe o resfriado común). Exigencias laborales de los conductores profesionales Las exigencias laborales son los requerimientos específicos que tienen los conductores a consecuencia de la actividad que de- sarrollan y de las formas de organización y división técnica del trabajo. Pueden afectar tanto la salud física como la mental; se determinan principalmente la jornada de trabajo, la rotación de turnos, el trabajo estático o dinámico, el trabajo nocturno, el ritmo intenso, la supervisión el ambiente de trabajo y otros factores psicosociales. Se manifiestan principalmente en fatiga, estrés, enfermedades psicosomáticas, alteraciones orgánicas y funcionales, como: trastornos del sueño, pérdida del apetito, al- teraciones de la vida sexual, depresión, ansiedad, irritabilidad, dolores de cabeza, trastornos de digestión, úlcera, gastritis, an- gina de pecho, infarto e hipertensión arterial, entre otros. Conclusión Los riesgos y exigencias de la actividad de los conductores pro- fesionales determinan la salud-enfermedad, tanto física como mental de los trabajadores; de aquí, la importancia de dar a co- nocer a los conductores las consecuencias de su proceso de tra- bajo. Sin embargo, de acuerdo con un estudio del Instituto de Salud Carlos III el servicio de prevención en las empresas espa- ñolas de transporte de mercancías por carretera, en los con- ductores, se observa un alto desconocimiento sobre las moda- lidades preventivas de los centros de trabajo (34,3%), y los ser- vicios de prevención se asocian al tamaño de la plantilla. Es de- cir, aunque en España predominan las empresas con menos de 49 trabajadores (73%), estas son en las que se realiza menos prevención. Por lo que, estas empresas, deben conocer los be- neficios económicos asociados a la salud y bienestar de los tra- bajadores, que entre otros se tienen menos accidentes y ausen- tismo, mejor servicio y mayor precisión en las entregas a tiem- po; por lo que, al mismo tiempo, durante la capacitación de los conductores, además de factores sobre seguridad vial, se deben promover los riesgos y exigencias a la que se enfrentan, con el fin de concientizar sus actividades. Los factores climatológicos exponen a los conductores a la humedad del ambiente, el viento y temperaturas de frío o calor, que en ocasiones pueden ser extremas. De manera inmediata, los conductores pueden padecer enfriamientos o golpes de ca- lor, producidos por cambios de temperatura al entrar o salir a sus habitáculos climatizados, y a la larga, estos cambios de tem- peratura pueden producir efectos reumáticos. Agentes químicos Los conductores durante toda su jornada respiran las emisio- nes contaminantes de sus vehículos, tales como bióxido de car- bono, dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno y demás partícu- las contaminantes. Además, durante la revisiones o reparacio- nes de sus vehículos se exponen a sustancias irritantes, toxicas o alérgenas. Así, los conductores pueden padecer irritación en las vías respiratorias, dermatitis, eccema o sensibilización cutá- nea, entre otros trastornos de la piel. Agentes mecánicos Los agentes mecánicos incluyen los peligros potenciales en las herramientas, las máquinas, los vehículos e incluso las instalacio- nes, terminales, talleres, bases o paraderos. Los padecimientos incluyen caídas, ya sea desde el vehículo o en alguna de las ins- talaciones, y que pueden producir fracturas en el cuerpo, lace- raciones o mutilaciones de extremidades, producidas con he- rramientas o motores, y muertes por accidentes de tránsito. Agentes biológicos Aunque el riesgo es mínimo, los conductores pueden ser conta- giados al transportar pasajeros que padecen enfermedades in- fecciosas, ya que muchas bacterias son transmitidas a través del aíre al toser estornudar o hablar. En general, la transmisión re- quiere gran cercanía entre el enfermo y el contagiado, ya que el aire carece de los nutrientes y la humedad necesarios para per- mitir una larga supervivencia de muchos patógenos. Sin embar- go, los conductores pueden ser contagiados de enfermedades bacterianas (como tuberculosis, faringitis, neumonía, difteria, le-

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