Incorporar la perspectiva de género en los procesos de evaluación de riesgos y en el análisis de las condiciones de trabajo, permite crear puestos de trabajo saludables para todas las personas. Así, abordar los problemas y las necesidades reales de los grupos y equipos, se convierte en un imprescindible para las organizaciones que quieran ir más allá de la normativa y trabajar la mejora continua de su entorno.
Con este objetivo nace DIGEN, un proyecto financiado por el Instituto Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales (IAPRL) de la Junta de Andalucía, y desarrollado por el equipo de investigación del Laboratorio-Observatorio de Salud Laboral desde la Perspectiva de Género (LAOGEN) de la Universidad de Sevilla.
El 4 de junio, Alicia Arenas (Investigadora del Observatorio de Salud Laboral desde la Perspectiva de Género, IAPRL), nos hablará sobre la primera de las 9 escalas de DIGEN: los retos y aspectos de salud física, a través de indicadores como riesgos biológicos y químicos, embarazos, esfuerzo físico…