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¿Qué es un material compuesto?

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Barin

Un material compuesto es el que se forma por la unión de dos o más diferentes materiales.

¿Y por qué quiero unir materiales?

Muy sencillo: porque quiero conseguir una combinación de propiedades que no es posible obtener si solo cuento con el material original.

Los materiales compuestos  nacen –por tanto– de la necesidad de obtener materiales que combinen las propiedades de los materiales cerámicos, de los materiales plásticos y de los metales y que me ofrezcan unas determinadas propiedades como, por ejemplo, una rigidez específica, un peso concreto, una resistencia específica, un rendimiento si está expuesto a alta temperatura, resistencia a la corrosión, un determinado grado de dureza o de conductividad…

Las propiedades mecánicas de los materiales compuestos son superiores a la simple suma de las propiedades de sus componentes.

No pertenecen a los materiales compuestos los materiales polifásicos, como las aleaciones metálicas, en las que mediante un tratamiento térmico se cambia la composición de las fases presentes

A pesar de haberse obtenido materiales con unas propiedades excepcionales, en muchas ocasiones,  las aplicaciones prácticas se ven reducidas por algunos factores que aumentan mucho su costo, como la dificultad de fabricación.

La utilización de materiales compuestos  es imprescindible en gran parte de nuestros procesos industriales.

Por ejemplo, en la industria del transporte aeronáutico la utilización de materiales compuestos es crucial porque son necesarios materiales lo más ligeros posible, rígidos y muy resistentes al impacto y, además, que también resistan la corrosión y el desgaste, propiedades  que rara vez se dan juntas.

Pero, ¿qué ocurre cuando corto, taladro, pulo…, gran parte de los materiales compuestos?

Esto…

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Y ese polvo, ¿puedo evitarlo?

Normalmente no porque los trabajos que tengo que realizar generan polvo inevitablemente.

Si, además, lo “dejo salir” al lugar en el que estoy trabajando, acaba depositándose en ropas, suelos, herramientas… Y, lo peor…¡en mis pulmones!

Hay una solución: capturarlo en su origen, es decir, en el punto en el que sale al exterior y, además, si lo filtro…problema solucionado.

¿Cómo?

Con aspiración y filtración.

Aspiro el polvo en el origen del proceso, evitando que pueda ser respirado no solo por el operario que lo produce en su puesto de trabajo sino también por las personas que se encuentran a su alrededor..

Y filtro el aire contaminado por el polvo, reteniendo las partículas más pequeñas, las que pueden llegar a los pulmones.

Y es que en Barin nos preocupa el aire que respiras.