Los datos de accidentalidad de los asociados de COASHIQ revelan un avance constante en seguridad industrial

sector químico

Saturnino Mur, actual Coordinador de Accidentes, Seguridad Industrial
y Respuesta ante Emergencias de COASHIQ y Responsable de Seguridad de la empresa Duke Chem.

COASHIQ

Durante el año 2020, el sector de la Industria Química logró mantener unos elevados estándares de seguridad. Y no solo eso; comparando los resultados anuales del Índice de Frecuencia (I.F.) y el Índice de Gravedad (I.G.) con otros sectores económicos del país, los valores obtenidos en el ámbito de COASHIQ -la Asociación Empresarial que trabaja para la Seguridad, Higiene y Medio Ambiente en la Industria Química- son inferiores al de resto de sectores, tal y como se extrae de los datos publicados por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) en el apartado “Observatorio para el año 2020”. Un indicador que evidencia el alto estándar de seguridad en la industria química y el compromiso activo de este sector que, incluso en plena fase de pandemia, ha mantenido estos valores en similitud a los datos anteriores a la aparición de la Covid-19.

¿Cómo se están logrando estos resultados?

Entre las motivaciones principales de COASHIQ está el trabajar por el bienestar y la integridad de los trabajadores del sector químico, y estimular a las empresas asociadas en su compromiso por la mejora constante en materia de seguridad y salud.

Por ello concede sus Premios Anuales a la Gestión de la Seguridad, con los que reconoce y destaca el esfuerzo y los recursos dedicados por las empresas asociadas a mejorar las tasas de accidentalidad y buenas prácticas.

Unos premios que, además de como reconocimiento, COASHIQ toma como oportunidad para que las buenas y efectivas metodologías y medidas que han llevado a esas empresas a lograr un Índice de Frecuencia=0 sirvan para inspiración, mejora y aprendizaje del resto de asociados.

Compartir datos y buenas prácticas para mejorar en conjunto

Bajo el término genérico de “Sector Químico” o “Industria Química” en realidad se congregan numerosos subsectores, todos ellos representados en COASHIQ, tales como la Industria de Química Básica, Gasística, Transformación, Extractiva, Laboratorios Farmacéuticos, Petróleo y Química Fina. A día de hoy, COASHIQ representa a un 25% de los trabajadores de la Industria Química española de más de 200 empresas.

Saturnino Mur, actual Coordinador de Accidentes, Seguridad Industrial y Respuesta ante Emergencias de COASHIQ y Responsable de Seguridad de la empresa Duke Chem, explica que “los informes estadísticos de COASHIQ, base de la concesión de estos Premios, se elaboran a partir de la aportación de datos, anual y voluntaria, que remiten nuestros asociados a través de un formulario concebido para poder obtener datos reales sobre accidentes con baja, sin baja o in itinere (en desplazamiento al centro de trabajo). En ellos también se recoge información de relevancia sobre las causas más notables de accidentabilidad en las empresas y se elabora una clasificación estandarizada que permite obtener una información depurada y homogénea, lo que facilita su uso para la posterior categorización y estudio final”.

Toda esta valiosa información, además, es puesta a disposición de las empresas asociadas por parte de COASHIQ; tanto el reporte de siniestros como diferentes comparativas por sector, distribución según el tipo de trabajo, así como sus causas básicas y todo el conjunto. Todo ello con el fin de facilitar que los técnicos responsables de la Seguridad y Prevención en las empresas asociadas tengan a su disposición una herramienta fiable y sencilla con la que puedan estudiar la mejor manera de afrontar los planes de reducción de la siniestralidad en su entorno más próximo.

Con todo, los técnicos de prevención de las empresas miembro son, al mismo tiempo, quienes generan los datos y los usuarios de los mismos, por lo que la validez y fiabilidad de estos datos es de alta importancia tanto para la Asociación como para todos y cada uno de los usuarios. Unos datos que, además, están avalados por las diferentes mutuas de accidentes empresariales.

Para la clasificación de los accidentes reportados se establece una casuística de seguimiento tomando como referencia los criterios establecidos por el INSST. La identificación “en campo” de los accidentes con más incidencia son los producidos en el ámbito mecánico, seguidos en porcentajes muy similares por los de carácter ergonómico junto con tropiezos y resbalones. Por último, en una valoración muy inferior de la media, estarían los accidentes estrictamente atribuidos a las sustancias o el proceso químicos.

Saturnino Mur señala que “como asociado, puedo decir que la utilidad de estas publicaciones es infinitamente positiva y que mejora de una manera sustancial su aplicación posterior en el trabajo del día a día que se realiza desde los Departamentos de Seguridad y Salud de las empresas miembro. En COASHIQ siempre nos hemos enorgullecido de poder contar con este pilar fundamental de documentación y estudio, y de poder ponerlo a disposición de las empresas. De esta manera, se refleja el elevado compromiso de estas con la cultura y gestión preventiva de la Seguridad y Salud colectivas”.

Históricamente, COASHIQ fue la primera asociación del sector en comenzar a establecer este tipo de registros, desde los años 80. Una disponibilidad de datos que ha permitido que cada empresa pueda ser cómplice en la mejora porcentual de los mismos y en los logros asimilados por todo el conjunto de usuarios.

Volviendo a los Índices de Frecuencia y de Gravedad, en los informes de siniestralidad COASHIQ del pasado año los valores medios de I.F. e I.G. obtenidos por las empresas fueron de 6,69 y 0,43 respectivamente. “Todo ello pone de manifiesto la importancia de la Cultura Preventiva en la Seguridad y Salud de las empresas, que se ve reforzada por planes de formación y seguimiento en el control de accidentes”, ha señalado Saturnino Mur.

Otro aspecto remarcable es la reducción del valor porcentual en casi un 5% de las horas trabajadas, el número de accidentes ocurridos, y de las jornadas perdidas por accidentes con baja. Dicho de otro modo, “el efecto de la pandemia sufrido por la COVID19 está incidiendo en el tiempo total trabajado de una manera general para todo el tejido industrial y en la industria química en particular”, ha señalado Mur.

Para este 2021, el objetivo que se ha fijado COASHIQ está en obtener un Índice de Frecuencia del 6,17 o inferior, situándose un 5% por debajo de la media lograda en los tres últimos años (del 2018 al 2020). Este valor se establece como objetivo por consenso entre todos los delegados de COASHIQ.

En definitiva, el punto de partida siempre debe estar en el respeto y cumplimiento de los procedimientos y protocolos de seguridad y salud establecidos por los profesionales de cada empresa, junto con la aplicación de planes de formación específicos para todo el personal y a todos los niveles. “Será de ahí de donde obtengamos el reflejo real de la accidentabilidad en los lugares de trabajo, y desde ese punto también podremos establecer elementos de mejora dentro de los planes para la mejora de la accidentalidad que, cada vez más, son de uso y aplicación interna en las empresas. Los Técnicos de Prevención de COASHIQ conocen de primera mano y de manera efectiva y puntual los informes estadísticos, y aprovechan para establecer criterios comunes en la lucha contra la siniestralidad sin desfallecer en la búsqueda del logro final, la consecución del valor ‘Cero Accidentes’ que tan bien conocen las empresas miembros de una asociación como COASHIQ”, ha concluido Mur.