Los cascos de protección son los equipos de protección individual diseñados para resguardar la cabeza de los riesgos existentes en el lugar de trabajo o disminuir los daños derivados de un accidente. En los trabajos en los que existe el riego de entrar en contacto con la corriente eléctrica, la protección del operario es vital ya que estos trabajos pueden tener consecuencias fatales para el trabajador sin el equipamiento adecuado. Si se está en contacto con corriente eléctrica, se debe prevenir el choque eléctrico que puede producirse por el contacto con un elemento conductor que se encuentre a cierta tensión. Estos cascos, cuando son utilizados simultáneamente con otros equipos de protección eléctricamente aislantes, previenen del paso de una corriente peligrosa a través de las personas entrando por la cabeza en trabajos en tensión o en proximidad de partes en tensión sobre instalaciones que no excedan de los 1000 V en corriente alterna, o de 1500 V en corriente continua (rango de baja tensión).
Los cascos eléctricamente aislantes son equipos de protección individual con características aislantes y destinados a la protección de la cabeza en instalaciones de baja tensión lo que les confiere la clasificación dentro de la Categoría III al proteger frente al riesgo eléctrico.
Certificación
Para asegurar que los cascos pueden proteger frente a este riesgo entre otros, es necesario que estén certificados por un organismo notificado. AITEX es organismo notificado número 0161 designado por la Comisión Europea para evaluar la conformidad de equipos de protección individual según Reglamento (UE) 2016/425, así como su marcado CE, antes de su puesta en el mercado comunitario.
La norma aplicable mediante la cual se puede certificar un casco frente a riesgos eléctricos es la norma EN 50365, la cual establece los ensayos necesarios para asegurar su eficacia previniendo las temidas descargas eléctricas sobre el usuario a través de la cabeza.
Protección adicional
Además, estos cascos pueden proteger frente a otros riegos, como los mecánicos e incluso térmicos, debido a que la norma aplicable obliga, adicionalmente, al cumplimiento de la norma EN 397, para cascos de uso general en la industria, o al cumplimiento de la norma EN 443, cascos de bomberos para la lucha contra fuego en los edificios y otras estructuras.
Por lo tanto, los cascos eléctricamente aislantes también protegen la parte superior de la cabeza contra los efectos de un impacto o perforación de objetos que puedan caer sobre el usuario. En caso de cumplimiento de la norma para cascos de bomberos, también protegerían del calor y la llama durante la lucha contra el fuego.
Además de ser organismo notificado número 0161, el compromiso de AITEX por la seguridad de los trabajadores se refleja en que el centro de innovación sea ya un referente nacional e internacional en la evaluación y certificación de equipos de protección individual.