La palabra “formación” tiene varios significados, pero cuando aludimos a la formación en materia de trabajos temporales en altura nos referimos a la acción y efectos que se realizan para dar los conocimientos y habilidades necesarias a una persona en dicha materia.
Desde SST (Special Services & Training) hemos podido observar que todavía existen falta de conocimientos en cuanto a las disposiciones legales o normas reglamentarias de aplicación en este sector, así como el adiestramiento adecuado en la utilización de los equipos de protección individual, complementos o accesorios destinados a proteger contra los riesgos de caídas en altura.
Para la realización segura de un trabajo temporal en altura es fundamental que la formación que reciba el trabajador sea conforme a lo establecido en el artículo 19 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, la cual debería tener una parte teórica y otra práctica adecuada al trabajo a realizar en materia preventiva.
Queremos recalcar que la seguridad debe quedar garantizada, tanto para la formación como para la realización de un trabajo temporal en altura. Esto conlleva unas medidas preventivas adecuadas, así como una buena planificación y buenas prácticas.
Elección de los EPIs
No podemos olvidar la elección adecuada de los EPIs que formarán parte de los sistemas de protección individual contra caídas. Estos deberán proporcionar una protección eficaz a los riesgos, ya sean para su uso en formación como para trabajos temporales en altura, sin que supongan por sí mismos riesgos o molestias adicionales.
A la hora de definir las características de los equipos de protección individual, lo primero que se debe considerar es que cumplan con las disposiciones legales o reglamentarias que les sean de aplicación, es decir, deberán cumplir con lo dispuesto en el Reglamento (UE) 2016/425 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 9 de marzo de 2016, relativo a los equipos de protección individual y por el que se deroga la Directiva 89/686/CEE del Consejo.
Por otro lado, los EPIs anticaídas desde altura -que se emplean en formación o en trabajos temporales en altura- deberán usarse conforme a las instrucciones del fabricante, así como el mantenimiento, desinfección, reparación, etc.
Una de las exigencias de las normas de aplicación es la revisión periódica, una medida preventiva que garantiza el perfecto estado de los EPIs para su uso, la cual debe efectuarse por una persona competente.
SST lleva a efecto esta medida preventiva no sólo cada 12 meses -como exige la norma de aplicación- sino en cada acción formativa, quedando así garantizada la verificación de los EPIs anticaídas de altura.
Por otro lado, SST aboga por unas buenas prácticas en la formación, desde la elección de los EPIs anticaídas de altura, su cuidado, mantenimiento y verificación, como en la elección de los profesores, los cuales cumplen con el perfil adecuado, están actualizados en cuanto a la legislación vigente y métodos o técnicas de enseñanza-aprendizaje, y en una amplia experiencia profesional sobre los sistemas de protección individual contra caídas empleados en infinidad de situaciones y/o técnicas para operaciones de salvamento en altura y en espacios confinados.
Experiencia acumulada
La experiencia acumulada de SST tras años impartiendo formación -ya sea en el sector privado o público- en materia de trabajos temporales en altura nos conduce a estudiar en profundidad las necesidades del cliente, diseñar la acción formativa adecuada al trabajo a realizar y emplear la metodología más idónea conforme a las características del alumnado para conseguir los objetivos planteados en el diseño y/o planificación de las acciones formativas.
Por otro lado, servimos de apoyo para el asesoramiento -tanto el sector privado como público- a la hora de adquirir EPIs anticaídas de altura y equipos de salvamento, así como a fabricantes para el diseño de equipos para su fabricación y comercialización.
Otra de las especialidades formativas que se realiza son las de operaciones de salvamento en altura y en espacios confinados, comúnmente llamadas “rescate”, que pueden ser en medio natural, artificial o industrial, siendo necesario que el alumnado tenga como pilar fundamental una formación previa y adecuada en los diferentes sistemas de protección individual: sistema anticaídas, sistemas de sujeción, sistema de acceso por cuerda y sistema de retención.
Para finalizar, todas las acciones formativas en materia de trabajos temporales en altura y operaciones de salvamento son evaluadas mediante la observación, sistema que permite al profesor determinar el grado de aprendizaje del alumno/a que consiste en la repetición de una o varias veces el acto o fase práctica que previamente ha demostrado por el profesor, aplicando la metodología básica del “aprender haciendo”. Por todo lo explicado en este artículo podemos concluir diciendo que “la formación es su mejor inversión”.
