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Carlos Arenal Ingeniero de Proyectos Asociación Empresarial Eólica

El sector eólico se mantiene líder en baja siniestralidad garantizando la seguridad y la salud de los trabajadores

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A finales de 2022, la Asociación Empresarial Eólica (AEE) publicaba la undécima edición del Informe de Siniestralidad del Sector Eólico. Nuestra industria siempre se ha caracterizado por la importancia que concede a la prevención de riesgos laborales y por la implicación de toda su cadena de valor en garantizar la seguridad y salud de los trabajadores, desde fabricantes hasta empresas de mantenimiento y operación. 

Este interés por la PRL se debe a la gran variedad de riesgos asociados a la fabricación, instalación, operación y mantenimiento de los parques eólicos al desarrollarse estas actividades en situaciones de trabajo complejas y bajo condiciones ambientales adversas.

En esta edición del informe se presentan los datos de siniestralidad correspondientes al año 2021, habiendo contado con una muestra amplia y representativa de 12.247 trabajadores correspondientes a 48 empresas diferentes.

Los datos empleados para la elaboración de este informe se recopilan a través de una herramienta informática desarrollada por AEE, la cual permite la adquisición y gestión de la información para realizar estadísticas colaborativas. Además, posibilita a las empresas la introducción de sus números de forma completamente confidencial y sencilla.

Los datos reportados por las empresas se dividen según su actividad en promoción, fabricación, construcción y puesta en marcha, mantenimiento, y otros servicios (consultoría, ingeniería, actividades formativas, etc.).

Seguimiento de la evolución

Con el objetivo de tener indicadores que permitan realizar un seguimiento de su evolución a lo largo de los años, independientemente de la muestra considerada, y que faciliten la comparación con otros sectores, se consideran como referencia los principales indicadores de siniestralidad elaborados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y utilizados por el INSST: 

  1. Índice de incidencia. Número de accidentes con baja ocurridos durante la jornada laboral en relación con el número medio de trabajadores expuestos al riesgo.
  2. Índice de frecuencia. Relaciona el número de accidentes laborales con baja con el número total de horas realizadas por el colectivo de trabajadores expuestos al riesgo.
  3. Índice de gravedad. Jornadas laborales perdidas como consecuencia de los accidentes con baja relacionadas con el tiempo trabajado efectivo.
  4. Duración Media de las Bajas. Relaciona las jornadas laborales perdidas con el número de accidentes que han tenido lugar.

Evolución positiva

En 2021, los índices de siniestralidad del sector mostraron una evolución positiva (Figura 1): el índice de frecuencia y el índice de gravedad decrecieron un 23% cada uno respecto a 2020 hasta los 5,10 accidentes por cada millón de horas trabajadas y 0,17 jornadas laborales perdidas por cada 1.000 horas trabajadas en 2021 respectivamente. Además, la duración media de las bajas se mantuvo prácticamente constante, en 32,57 días. La única excepción a estos buenos resultados fue el índice de incidencia, el cual aumentó un 12% respecto a los datos de 2020, hasta los 10,78 accidentes por cada mil trabajadores. Sin embargo, se ha conseguido una estabilización en el sector alrededor de los 10 accidentes por 1.000 trabajadores en los últimos años, dato relativamente positivo.

Figura 1. Evolución de los índices de siniestralidad del sector eólico por actividad.
Figura 1. Evolución de los índices de siniestralidad del sector eólico por actividad.

La actividad con mayor siniestralidad

Un análisis más detallado muestra cómo la actividad del sector con mayor siniestralidad es la fabricación (19,83 accidentes por cada 1.000 trabajadores), tal como era de esperar por los mayores riesgos a los que están expuestos los profesionales de estas empresas. Por contrapartida, la promoción y otros servicios (consultoría, actividades formativas, etc.) muestran un menor número de accidentes, con menos de 2 accidentes por cada mil trabajadores.

El estudio realizado también permite conocer la tipología de los accidentes reportados. Así, se concluye que la mayor parte de los accidentes reportados en 2021 fueron debidos a golpe contra un objeto inmóvil (trabajador en movimiento), por sobreesfuerzos, y por choque o golpe contra objeto en movimiento.

A pesar de la leve mejora de 2021 y para continuar reduciendo los datos de siniestralidad en los próximos años, la coordinación de actividades empresariales (CAE) y la formación en PRL son fundamentales ante los retos que afronta el sector para la puesta en marcha de nuevos parques eólicos y el incremento de la presión competitiva a la que se encuentra sometido.

Por último, es necesario destacar que el sector eólico sigue siendo líder en baja siniestralidad, más aún si se compara con otros sectores como la industria o la construcción (Figura 2), y mantiene su firme compromiso con la PRL para conseguir una reducción práctica de los accidentes.

Figura 2. Evolución del Índice de incidencia comparado con otros sectores. Fuente: AEE y Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Figura 2. Evolución del Índice de incidencia comparado con otros sectores. Fuente: AEE y Ministerio de Trabajo y Economía Social.