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Lola Herrera Jefa del Servicio de Higiene Industrial Instituto Reginal de Seguridad y Salud en el Trabajo (IRSST)

La gestión del amianto: más allá de un procedimiento administrativo

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“Soy porque tú eres. Eres porque somos”: esta frase es lo que significa “Ubuntu”, una filosofía africana cuyo principio fundamental es que el bien común es el bien propio.

En el Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Comunidad de Madrid (IRSST), aplicamos esta filosofía en el desarrollo de una función esencialmente administrativa y técnica, como es el estudio y aprobación, en su caso, de los planes de trabajo con riesgo de amianto.

La importancia del amianto y su final

Es absolutamente conocida la importancia del amianto en la industria y en la construcción por tratarse de un mineral con alta resistencia al calor y la corrosión.

Sin embargo, la naturaleza fibrosa del amianto lo convierte en un peligro para la salud, por lo que está prohibida su utilización, producción y comercialización en España desde junio de 2002, si bien se permite el uso de productos con amianto ya instalados o en servicio antes de esa fecha, hasta su eliminación o el fin de su vida útil: hablamos de cubiertas, chimeneas, tuberías, frenos, juntas de calderas, revestimientos de paredes y techos, pinturas, pegamentos, etc.

Recordemos que la exposición a fibras de amianto a largo plazo puede derivar en cáncer de pulmón, mesotelioma y asbestosis, puesto que el amianto es un carcinógeno de categoría 1A, es decir, se sabe que es cancerígeno para el hombre.

En el ámbito de la gestión de los residuos, por medio de la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular -en aras de la salud humana y el medioambiente- se exige a los ayuntamientos que ya hayan elaborado un censo con las instalaciones y emplazamientos públicos con amianto y un calendario de retirada, debiendo estar gestionadas las de mayor riesgo antes de 2028.

El RERA y el plan de trabajo

Debido a la altísima preocupación por los graves efectos para la salud derivados de la exposición a las fibras de amianto en operaciones de derribo, rehabilitación, mantenimiento, reparación, etc., se requiere la especialización de las empresas que realizan estas labores, su inscripción en el ‘Registro de Empresas con Riesgo de Amianto’ (RERA) del IRSST y la elaboración por ellas de un plan de trabajo que debe ser aprobado por la autoridad laboral.

El procedimiento administrativo

Con la presentación de la solicitud de aprobación del plan de trabajo a través de la sede electrónica de la Comunidad de Madrid, se inicia el procedimiento administrativo cuyo plazo para resolver y notificar es de cuarenta y cinco días: este procedimiento finaliza con la emisión de resolución de aprobación, denegación o desistimiento.

Para poder emitir la citada resolución son preceptivos los informes de la Inspección de trabajo y Seguridad Social (ITSS) y del IRSST.

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